martes, 15 de mayo de 2012

Un poco de Vian y un poco de Pessoa

Por un lado, quiero compartir la última entrega de No se fíe de nosotros, ciber-emisión de radio que debería haber recomendado antes y en la que he tenido el placer de colaborar hablando -adivinen- de Boris Vian:


Por otro, he encontrado, en un relato de René Frégni, unos versos (los primeros) de Tabacaria, que Fernando Pessoa firmó como «Álvaro de Campos». No hace falta haber estudiado portugués para entender este monumento en tres versos:
Não sou nada.
Nunca serei nada, não posso querer ser nada.
À parte isso, tenho em mim todos os sonhos do mundo.

miércoles, 9 de mayo de 2012

Distancia

Participamos de cierto culto a la distancia
que «permite apreciar mejor las cosas»...
pero hay otra distancia, que sirve
para especular con el sustento ajeno,
para enviar peones a la muerte,
regar aguas y tierras con veneno
y crear cámaras de gas.

Esa distancia a la que la sangre no salpica,
un rictus de dolor se confunde con cualquier otro gesto
y «miedo» sólo parecen cinco letras.

Los francotiradores, al menos,
tienen la decencia de disparar con mira telescópica.